Madrid, 3 de noviembre de 2020. Crue Universidades Españolas se suma a la declaración emitida por la Asociación Europa de Universidades (EUA) y la Unión Europea de Estudiantes (ESU) para condenar las «graves violaciones» de Derechos Humanos y democráticos que se producen en Bielorrusia contra estudiantes y personal de las universidades. En concreto, denuncian las recientes amenazas de expulsión, despido y reclutamiento militar por parte de las autoridades de este país y reclaman al Gobierno de Aleksandr Lukashenko que se abstenga de reprimir las protestas pacíficas y que garantice a todos los ciudadanos, incluidos los estudiantes y personal universitario, el derecho a la libertad de expresión, reunión y protesta.
Crue apoya este comunicado de la EUA y ESU en el que instan al Ejecutivo bielorruso a reconsiderar la reciente decisión de no reconocer los títulos de instituciones educativas extranjeras porque contraviene el Convenio de Reconocimiento de Lisboa, firmado también por Bielorrusia en 1997. Para estas organizaciones europeas, la reforma del sistema de Educación Superior que está desarrollando el Gobierno de Bielorrusia en el marco del Proceso de Bolonia para incorporarse al Espacio de Educación Superior ha pasado a ser «inapropiado» e imposible en estas circunstancias, pues, según recuerdan, «se basa en la transparencia, la colaboración, la confianza mutua y la asociación entre los gobiernos y las partes interesadas de la Educación Superior, así como en el respeto por la libertad académica y la autonomía institucional».
En este sentido, EUA y ESU advierten de que todos los miembros del llamado Proceso de Bolonia, entre los que se incluye Bielorrusia, se comprometieron a respetar estos valores fundamentales en el Comunicado de París de 2018 y esperan que los reafirmen el próximo 19 de noviembre de 2020, cuando se firme el Comunicado de Roma. «Estos compromisos no pueden ser solo palabras vacías, deben ir acompañadas de acciones», apostillan.
Por último, señalan que Europa es un lugar seguro para el refugio de académicos y estudiantes víctimas de gobiernos opresores y recuerdan que ya en 2019 alrededor del 80% de este colectivo en riesgo recibió el apoyo del programa Scholars at Risks (SAR) y fueron alojados en instituciones de educación superior. Sin embargo, también alertan en su declaración del considerable número de solicitudes rechazadas cada año por falta de financiación y reclaman a la Comisión Europea que establezca un programa específico para investigadores en riesgo.
