Crue Universidades Españolas aporta alternativas a la evaluación presencial

Ver el Informe de procedimientos de evaluación no presencial​

Madrid, 23 de abril de 2020. La situación generada por el estado de alarma a consecuencia de la propagación de la COVID-19 ha supuesto la adopción de medidas extraordinarias por parte del Gobierno, de las comunidades autónomas y de los rectorados de las universidades en relación con la suspensión de la actividad académica presencial y su mantenimiento en modalidad a distancia en todos los centros formativos de Educación Superior del Estado. En consecuencia, Crue Universidades Españolas ha desarrollado con el Ministerio de Universidades y las diferentes consejerías responsables una amplia batería de acciones para afrontar la situación de contingencia permitiendo un desarrollo adecuado de la actividad docente universitaria con el objetivo de que ningún estudiante pierda el curso a causa de la pandemia.
Entre estas actuaciones, destaca la constitución en el seno de Crue de un Grupo de Trabajo intersectorial (Crue–Secretarías Generales, Crue–Docencia, Crue–TIC y Crue-Asuntos Estudiantiles) para analizar la adaptación de los procedimientos de evaluación presencial en las universidades españolas desde una perspectiva global, preservando la calidad de servicio de los procesos de evaluación del estudiantado en el curso 2019-2020.
El trabajo de este grupo, integrado por once de expertos, se ha materializado en el informe «Procedimientos de Evaluación no Presencial. Estudio del Impacto de su Implantación en las Universidades Españolas y Recomendaciones», que aborda todas las dimensiones metodológicas, normativas (incluyendo los aspectos relacionados con la protección de datos) y tecnológicas.  
El documento analiza los procedimientos de evaluación y aporta un listado de alternativas, con sus características principales desde la perspectiva metodológica, entre las que se encuentran el examen oral, la prueba escrita abierta, el trabajo académico, el mapa conceptual, el diario reflexivo, proyectos o problemas, entre otras cuestiones. 
Asimismo, el informe recoge las herramientas tecnológicas más habituales para desarrollar esos procedimientos de evaluación no presencial y define unos escenarios generales de cumplimiento normativo y tecnológico, respectivamente, que agrupan dichos procedimientos.